Cántalo, pero báilalo*




Yo, para bienamarte,
invento una canción
―una canción que parte
acostumbrada a voz de trovador.
Pero si quieres son,
te doy mi son.

Camisa de once varas
en la que me metí,
aunque no es cosa rara
si se entiende bien
que soy de aquí.
Claro que soy de aquí.
Ya tu verás que sí.

Para continuar la marcha
yo voy a polemizar:
la sangre se me hace escarcha
si no salgo a caminar.

La tierra por donde ando
hace sonar el amor:
lo pone a sonar bailando
y lo suena en la canción.

Si el canto tiene sentido,
también lo tiene bailar.
Cantando yo estoy contigo,
bailando conmigo estás.

Entona tu paso ahora,
entónalo y báilalo,
pero si la marcha atora,
entonces, pues, cántalo,
pero báilalo,
pero cántalo,
pero báilalo.

 

* Estrenada con Adalberto Álvarez y su orquesta.