La necedad y la esperanza de una noche en Avellaneda

de Octubre del


Silvio Rodríguez cerró su gira por Argentina que lo llevó a Córdoba, Rosario y Buenos Aires. Con un recital gratuito en Avellaneda hizo emocionar a decenas de miles de personas que además de sus canciones, entonaron consignas contra el Gobierno, contra el bloqueo a Cuba y por el aborto legal.

El juglar que sigue diciendo futuro

de Octubre del


El cantautor cubano repitió la ceremonia de sus recientes shows en el Luna Park, pero con el agregado emotivo de hacerlo frente a una multitud. En el concierto abordó temas nuevos, otros poco conocidos, y clásicos como “Te doy una canción” y “El necio”.

El romance del trovador y su gente

de Octubre del


Durante más de horas el cubano desplegó un repertorio lleno de clásicos, con algunas canciones más recientes e incluso inéditas. Dedicó el show "a los derechos de la mujer".

Nos quisieron matar y nos sembraron

de Octubre del


Así que las Abuelas no se anduvieron con cosas pequeñas e invitaron a León Gieco y Silvio Rodríguez, quien cantó para ellas algo que hace mucho no tocaba y dice: “sólo el amor convierte en milagro el barro/sólo el amor alumbra lo que perdura”

Silvio Rodríguez, con un marcado acompañamiento hacia las mujeres

de Octubre del


En la noche del domingo el cantautor cubano pasó por la Cuna de la Bandera y se sumó a las proclamas de género incluyendo la temática en gran parte de su repertorio. También hubo temas clásicos y un rechazo por parte del público al gobierno nacional, en un cántico contra la figura del presidente Mauricio Macri.

Silvio Rodríguez en Rosario: un pañuelazo para el reparador de sueños

de Octubre del


El cantautor cubano se presentó el último domingo ante cinco mil personas en el predio de la ex Rural. En dos horas de concierto ofreció canciones y versiones apoyado en la musicalidad de un gran septeto. En Eva, los versos se hicieron cuerpo en una marea de pañuelos verdes

Silvio Rodríguez: una revolución de amor, poesía y canción

de Octubre del


Ojalá nunca se calle. Silvio es “trovador”, que etimológicamente sería “agente de la canción”, y precisamente esa es la herramienta que utiliza para transmitir su mensaje. Con ella protesta, denuncia las injusticias y pretende, con cada palabra, incentivar un pequeño gran cambio en la sociedad.

Silvio Rodríguez: El hombre, la poesía y su guitarra

de Octubre del


El reencuentro del prestigioso cantautor cubano con el público capitalino se llevó a cabo en un Movistar Arena repleto. Como parte de una seguidilla de conciertos a lo largo del país, Silvio Rodríguez regresó a Santiago para ofrecer el primero de tres recitales en la ciudad, con una presentación donde repasó lo más destacado de su vasta discografía en poco más de hora y media de espectáculo, donde el coro del público y las emociones a flor de piel fueron las protagonistas de la velada.

Silvio en el Movistar Arena: Pensamos distinto sentimos igual

de Octubre del


Curiosamente cuando al término del primer bloque de nueve canciones Silvio Rodríguez se quedó a solas en el escenario sin la exquisita compañía de su banda de virtuosos, la sensación fue que este hombre de 71 años podría sentarse con la guitarra y apenas un foco encima por horas, cantando composiciones emblemáticas grabadas a fuego en los recuerdos

Gracias Silvio, por la necedad de vivir y cantar por los barrios, sin tener precio

de Septiembre del


Lirismo, buena música y razones más allá de lo imposible porque, como él mismo dice, de lo posible se sabe demasiado, fueron valores entrañables que definieron el concierto 95 de la Gira por los Barrios que emprendió el trovador Silvio Rodríguez en 2010 y que este viernes tuvo su escenario en las calles Primelles y Final, en el municipio habanero del Cerro.

Silvio tiene la llave

de Septiembre del


Cada encuentro de Silvio Rodríguez en los barrios es único e irrepetible. Deja huellas indelebles en la gente y, pienso también, en el cantor y sus acompañantes, pues no todos los días la poesía toma una calle, asoma a un balcón, y toca las puertas donde habitan personas ávidas de saciar esa segunda hambre de la que habló el gran cuentero Onelio en sus narraciones.